Es un elemento formal y concreto, es la unidad más simple irreductiblemente mínima de comunicación visual, la redondez es su formulación más corriente y se le encuentra en muchas partes de la naturaleza. Cuando un líquido cualquiera se vierte sobre una superficie, adopta una forma redondeada aunque no simule un punto perfecto.
Cuando hacemos una marca, sea con color con una sustancia dura o con un palo concebimos ese elemento visual común como un punto que puede servir de referencia o como un marcador de espacio. Cualquier punto tiene una fuerza visual grande de atracción sobre el ojo, tanto si su existencia es natural como si ha sido colocado allí por el hombre con algún propósito.
Dos puntos constituyen una sólida herramienta para la medición del espacio en el entorno o en el desarrollo de cualquier clase de plan visual. Aprendemos pronto a utilizar el punto como un sistema de notación ideal junto con la regla y otros artificios de medición como el compás. Cuanto más complicadas sean las mediciones necesarias en un plan visual, más serán necesarios.
Cada vez que los vemos, los puntos se conectan y por tanto son capaces de dirigir la mirada. En gran cantidad y yuxtapuestos: crean la ilusión de tono o color que es el hecho visual en que se basan los medios mecánicos para la reproducción de cualquier tono continuo.
Seurat en sus pinturas puntillistas, que son notablemente variadas en tono y color, exploró el fenómeno perceptivo de la fusión visual, utilizo utilizó sólo cuatro botes de pintura: amarilla, roja, azul y negra y la aplico con pinceles finos y puntiagudos. Todos los impresionistas investigaron el proceso de la mezcla, el contraste y la organización que tenía lugar ante los ojos del observador.
Envolventemente y excitante este proceso era en ciertos aspectos similares algunas de las más recientes teorías de McLuhan según las cuales la participación y el compromiso visual que se dan en el acto del ver forman parte del significado.Pero nadie probó sus posibilidades de una forma tan completa como Seurat quien, en sus esfuerzos parece, haber anticipado al fotograbado en cuatricromía, proceso por el cual se reproducen hoy en las imprentas casi todas las fotografías y dibujos en cuatricromía a todo color.
El punto puede ser elemento constituyente de formas más complejas, si lo repetimos y distribuimos adecuadamente por el plano, puedo actuar de dos formas básicas, primero si el punto se representa como zona definida de interés; segundo se refiere a su capacidad de configurar formas concretas mediante agrupaciones o dispersiones, pero también aquí es importante considerar la configuración y tamaño de punto, sus variantes, redondo, cuadrado, estrellado etcétera.
Basta con que sea de un tamaño adecuado, que esté aislado de otros elementos y que tenga atractivo visual.
Tomado de “Diseño Gráfico” de Pedro Huapaya
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